Las especies exóticas invasoras (EEI) son aquellas especies que han sido extraídas de su medio natural y distribuido en otros medios de manera fortuita o intencionada, después de su introducción ocasionan grandes cambios en el ecosistema y ocasionando graves daños sobre fauna y flora autóctona del lugar. Estas especies suelen ser muy agresivas con capacidad de adaptación rápida y gran éxito de reproducción.

El mejillón cebra (Dreissena Polymorphal) es una de estas especies exóticas invasoras, un molusco bivalvo de agua dulce que posee una asombrosa adaptación al entorno y rápida colonización, especie catalogada como una de las cien especies exóticas invasoras mas dañinas del mundo (IUCN, 2000)

Entre las secciones de dispersión de esta especie invasora se encuentra la navegación tanto recreativa como deportiva, la pesca desde embarcación, pato y en ocasiones de orilla, los trasvases de agua a pequeña y gran escala y cualquier actividad que implique movimiento de aguas.

El mejillón cebra altera los hábitats de las especies autóctonas, además de un gran impacto ecológico encontrado en las instalaciones del embalse, ya sea embarcaderos, bombas de agua, y hasta en el muro de la presa.

En aguas de la cuenca del Ebro se detecto por primera vez en España en julio de 2001, en el meandro de Flix y el embalse de Ribarroja, en 2004 se confirmo su presencia en el embalse de Mequinenza, posteriormente en 2006 en el embalse de Sobron y en septiembre de 2008 en el embalse de Calanda.

En la cuenca Hidrográfica del Guadalquivir se descubrió por primera vez en 2009 en el pantano granadino de los Bermejales y en octubre de 2012 se hallo ejemplar en el embalse de Iznájar, en 2014 en la Breña II y en 2019 en el embalse de la Fernandina.

Tu ayuda contra la expansión de esta especie es muy importante para que no se sigua extendiendo, nuestro pantano podría ser el siguiente de esta lista, solo tienes que desinfectar y limpiar tu embarcación o pato al entrar y salir del agua en la que pescamos, seca todo tu material que haya estado en contacto con el agua, un pequeño gesto que nos refugiará a todos de contaminar nuestros embalses con esta especie invasora.